Existe en nuestro imaginario –y en el de otras muchas culturas, orientales y occidentales- un ave fabulosa cuyo simbolismo se relaciona con la ascensión a los cielos, el fuego purificador y los ciclos de muerte y resurrección. En nuestro entorno cultural se la conoce como el Ave Fénix, aunque podríamos identificarla –también- con el Bennu egipcio o el Tan Miao de los taoístas.
En todos los casos la representación es similar: una poderosa y fantástica ave con el aspecto de la reina de los cielos -el águila- aunque dotada de un plumaje del color del fuego con destellos celestes, púrpuras y oro. Más allá de las diferencias que encontramos entre las más variadas versiones del mito, todas éstas coinciden en que, cuando se siente morir, el ave Fénix acumula plantas aromáticas, incienso y cardamomo, y fabrica una especie de nido funerario. En él reposa y se deja consumir por su propio fuego interior, quedando reducido a cenizas… Y renaciendo de ellas.
He simplificado la estructura del mito para evitar perdernos en lo accesorio o, incluso, en lo anecdótico. Quien quiera profundizar, que acuda a los clásicos griegos y siga el hilo de Ariadna.
Detengámonos unos instantes a meditar en torno al simbolismo del ave Fénix:
¿Por qué el Fénix es un ave alada semejante al águila? Porque hace referencia a la ascensión, al vuelo, a la elevación de nuestra naturaleza. El Fénix nos habla de nuestro intento de aproximarnos a lo excelso, a lo más alto, a lo que el águila puede contemplar directamente y que, al mismo tiempo, se refleja en el plumaje de nuestro protagonista: el Sol, símbolo de la Divinidad.
Tenemos una tendencia natural hacia la Fuente de la que surgimos, hacia las cristalinas aguas de Vida que recibimos de lo alto de las montañas… Y por eso nuestra vida es tránsito, viaje, movimiento, camino, peregrinar hacia las cimas… Elevarnos, volar. Movimiento que se hace patente en su forma de pájaro, dotado de unas poderosas alas.
Pero ese tránsito, ese viaje, ese vuelo, no es lineal… Tiene altibajos. Es una experiencia que todos tenemos. Aunque nuestra intención nos llame a las grandes misiones, a las más altas cumbres, nuestro camino a veces sube y a veces baja; está asfaltado con victorias y fracasos, con alegrías y penas, con luces y sombras. Es la dualidad propia de la creación, el dinamismo propio de la existencia. Y, como arquetípico símbolo, el Fénix nos habla de la conciliación de los opuestos, de la superación de las apariencias, de levantar la vista más allá de esta vida y de esta muerte para percibir el ciclo de la Vida, que es una constante transformación en medio de lo Inmutable.
El secreto –y su enseñanza- se encuentra en que el Fénix prevé su muerte y la prepara, adecuando un nido perfumado, un sagrado altar que le ayude a transformar el fin en un nuevo comienzo. En el ocaso de su vida, el Fénix no se contenta con dejar apagar los latidos de su corazón… Toma la iniciativa y permite que el fuego purificador acabe con su vida actual, pero reservando su esencia para una nueva existencia. Lo pierde todo para ganar la Vida. Como en una alquimia vital, se somete al calor –tras prepararse- sabiendo que la transformación supondrá a un tiempo desaparición y permanencia, muerte y resurrección.
Llevamos repitiendo toda la semana que la vida es cambio, que en su constante mutación nos corresponderá disfrutar de éxitos y padecer fracasos, que nos creceremos y nos hundiremos… El Fénix nos da la clave del futuro: la esperanza. Porque, como esta ave mitológica, también nosotros debemos tomar consciencia de que somos únicos y disponemos en nuestro interior de una fuerza que nos permite morir a lo accesorio para renacer a las nuevas circunstancias de un modo milagroso y nuevo. Puede que tengamos que morir a los que hemos sido, para volver a ser nosotros en un entorno nuevo y dinámico. Cambiaremos el plumaje, pero seguiremos siendo quienes somos… Si nos preparamos para ello.
Cubrámonos de esperanza incluso ante el peor de los escenarios. El mundo cambia, y nosotros con él, pero –si nos preparamos en el vivir para ese morir-no perderemos nuestra esencia, no dejaremos de ser quienes somos. Deshagámonos del hombre viejo y vistámonos con una nueva túnica.
El fracaso es una pequeña muerte, un anticipo del auténtico morir. En nuestras manos está que sea el fin, la aniquilación, o una puerta hacia una nueva existencia, mejor y más evolucionada. No resulta casual que se relacione al Ave Fénix con el gusano de seda o con Jesucristo… Muerte y resurrección, un fallecer que no es un fin sino un nuevo comienzo… Sin renunciar al que se es, dando a luz una y otra vez al que se oculta en lo más profundo de nosotros mismos… Aunque, en ocasiones, ni nosotros mismos seamos conscientes de ello.
Mira al Ave Fénix, contémplate en su imagen… Porque habla de ti, y de mí. Siempre hay esperanza… El fracaso y la muerte son la puerta a un nuevo amanecer.
Seamos un ave fénix! 🙂
¡GRACIAS!
Siempre… Morir a lo accesorio para renacer cada día a lo más esencial.
Gracias a ti.
Sí vivir siendo auténtica vida…
De nada!!
Después de leer este post me ha venido a la mente el recuerdo de unas cuantas personas que desde mi perspectiva se han sumergido en esta dinámica de morir a lo accesorio para poder renacer ya en este mundo y en esta vida.
Felicitaciones por saberlo expresar de esta forma tan sugeridora y tan clara.
Gracias a ti, Jordi, por seguir fielmente mis divagaciones… Y por enriquecerlas habitualmente con tus más que sensatos y fundamentados comentarios.
Reblogueó esto en Fenix ey comentado:
Simbolismo Metáfisico del Ave Fenix.
Muchas gracias por esta reflexion y significado de el ave Fenix.
En estos momentos me encuentro en un torbellino de emociones, me encuentro en una situacion de separacion de mi esposa y lamentablemente de mis tres hijos.
Este año he pasado por tantos cambios al nivel espiritual y que me han llevado hasta aqui en donde me preparo para vivir solo con migo mismo, y asi poder vivir plenamente ese encuentro com Dios.
Tengo miedo y tristesa de sentir que estoy abandonando mi familia, pero el dia de hoy fue revelador, en el camino al trabajo en esta mañana fria de diciembre, algo me llamo la atencion, era una pancarta de un Fenix, estaba fuera de un comercio.
En ese momento solo se me hizo curioso sin mais, despues en el transcurso de el dia une vez mas una camioneta paso enfrente de mi adivinen con que imagen? Si! un Fenix! y luego de regreso à casa una vez mas se me cruzo en el camino una imagen de Fenix.
Très veces en un dia!
Ya habia oido hablar de el significado de el renacimiento de sus cenizas y en eso vi una respuesta à mis dudas de seguir mis instintos en la busqueda espiritual en la cual me estoy comprometiendo cada vez mas. Pero luego de leer este significado espiritual, no cabe duda que es mi destino y doy gracias à Dios de haber estado siempre conmigo y de haverme dado estos signos!
Que Dios los vendiga!
absolutamente falso, todo esto es una gran sugestión, bla, bla, siempre lo mismo, si que divinidad aquí, que salto hacia la fuente, aguas cristalinas, etc….. es aburrido.. que espiritualidad, que un despertar… y todo sigue su curso, de reblog en reblog, pero al final todo queda en igual, todos siguen es esa espiral inversa de la que no se pueden escapar, con todos esos deseos vanos, y negros, con el egoísmo, con la maldad interna, con el odio a tope, con la ira on fire más los 7 pecados capitales y otro. así que un buen día todos hablan de ascender y no se qué cosas más, pero al buen rato, vuelven a su estado original, un estado de idiotez
Bueno Eliseo, cada quien cree lo que quiere creer, algunos creen que esto es cierto y otros que no lo es, lo contradictorio es que tu, que obviamente no estas de acuerdo con lo aquí escrito, entres a estas paginas a leer lo que otros si creen, por la mera satisfacción de burlarte de ellos o dejar comentarios despectivos al final. Reevalua en que inviertes tu tiempo, porque aquí solo se escribe y se comparte para quien bien desee tomarlo, que en teoría, son esas personas las que entramos a leer y disfrutar. De todas maneras feliz día para ti.
asi como piensa el hombre asi es su vida, tal cual mediocridad tengas en el cerebro asi seras
Al ver la foto de perfil del Ave en llamas en uno de mis contactos, me dio la curiosidad de saber lo que quiere expresar y creo que cada quien busca un soporte sugestivo para salir adelante ante las circunstancias por las que atraviesa.
Respetable las opiniones.
Saludos a todos y a nadie.