La vida es una aventura.
O, al menos, puede serlo.
Tanto la tuya como la mía.
Depende de cómo la afrontemos.
La etimología de aventura hace referencia a los hechos inciertos que están por venir.
La aventura implica salir del camino trillado.
Abandonar las seguridades.
Atreverse a abrazar la novedad y el riesgo.
Tú decides si tu vida es aventura o repetición de otras vidas.
Si abres caminos nuevos o te limitas a pisar sobre las huellas que otros han dejado.
Si te quedas cómodamente aposentado sobre lo conocido, o si das el salto al vacío porque intuyes que hay una red de fortuna que nadie más ha visto.
La vida como aventura exige valor.
Valor, no temeridad.
Atreverse a dar un paso que cuesta porque no es seguro, aunque sea probable.
Uno no salta a ciegas, a lo loco.
Tiene un proyecto, un sueño, una esperanza a la que ha dedicado tiempo y esfuerzo.
Pero no basta con la entelequia.
Hay que realizar, hacer, construir, apostar.
A mayor riesgo, mayor beneficio.
Cuanto más virgen sea el camino que tomes, más probabilidades tienes de encontrar lo que nadie hasta ahora había encontrado…
Aunque también debes saber que el camino será más duro y peligroso, y puede que no te conduzca a donde esperabas.
Eso es lo que tienen las aventuras.
No tienen programa.
Ni mapa.
Puedes planificar, pero sabiendo que lo haces sobre humo, porque no sabes lo que te vas a encontrar.
Así es la vida.
Aventura.
Se gane o se pierda.
Se acierte o se yerre.
Con premio o sin premio, siempre tiene algo bueno…
El aprendizaje que uno obtiene.
A veces se gana, y otras se aprende.
Pero esas veces en las que se gana, ese tesoro, bien merece el riesgo y la incertidumbre.
Aventurarse es el camino hacia el éxito.
Me gusta cómo lo expresa Maxwell Maltz:
A menudo la diferencia entre un hombre triunfador y un fracasado no son las mejores habilidades o ideas del primero, sino el valor que tuvo al apostar por sus ideas, afrontar un riesgo calculado y su voluntad de actuar.
Como me dijo un buen amigo y maestro la semana pasada en la Cova de Manresa, es tiempo de realizar.
Hoy no basta con planificar, ni con concienciar… Urge la realización.
Los aventureros son más necesarios que nunca.
Es el momento adecuado, el Kairós.
¿Nos atreveremos?
Tengo un libro que te ayudará a elegir bien la aventura que tú debes emprender.
La que debes iniciar para alcanzar tu destino.
El Éxito, con mayúsculas.
Lo encuentras aquí: https://amzn.to/3TA5LFv
Tú decides si das, o no, el primer paso.
Pero puede que el tesoro que la Vida ha preparado para ti no te espere para siempre.
Puede que, si no te pones ya en marcha, otro llegue a él antes que tú.
El momento es importante.
Y el momento es ahora.
Da el primer paso.
No es preciso que lo hagas en soledad.
Puedes buscar un compañero de viaje.
Hazlo como quieras, pero hazlo ya.
¡Empieza!
¡Que tengas un fantabuloso día!
Nos seguimos leyendo.
Fantabuloso día para vos y toda tu comunidad queridp Quim!! Excelente como siempre!